domingo, 27 de enero de 2008

Secreto en la montaña (2005)

Brokeback mountain (Dir. Ang Lee) Primer western gay de la historia del cine, Secreto en la montaña, película basada en un cuento corto de Annie Proulx, recorre esa área del ser humano hasta el momento poco comprendida y malinterpretada: La homosexualidad. Dos hombres, dos vaqueros que se conocen trabajando en las montañas alimentándose de latas de frijoles, de latas de conserva, montando a caballo, cantando a gritos canciones desesperadas, tomando whisky, fumando, pescando, hablando de rodeos, de yeguas salvajes descubren el amor. Una noche de frío y de calor, en sus corazones, hacen el amor al mismo tiempo una de las 1000 ovejas que deben cuidar es desollada por un lobo. Ennis del Mar (Heath Ledger) perdió a su familia de pequeño y fue criado solo y por sus hermanos mayores quienes hicieron lo que pudieron; ahora Ennis intenta subsistir y hacer dinero para ahorrar y vivir holgadamente ya que está a vísperas de casarse con su novia, Alma (Michelle Williams) futura mujer y madre de sus hijos quien le dará tres dulces criaturas de su propia sangre: Junior, Monroe y Jenny. La represión, la vida que pasa, la tristeza van desuniendo y uniendo los caminos de estos dos vaqueros amantes. Ubicados en 1963 (Signal, Wyoming) Jack Twist y el difunto Heath Ledger interpretando a Ennis se revuelcan por el pasto y se agarran a besos en foribundos forcejeos. Ennis me hace recordar mucho a James Dean, por momentos, en Al este del edén, pareciera ser la historia de Dean contada detrás de cámaras. Los matrimonios heterosexuales postizos de ambos, el sexo anormal, la latencia del alma confusa, la incomunicación hacen un nudo en la vida de ambos. México es una escapatoria para el placer fácil. Esto no tiene riendas, echar el freno. La voz fuerte, la voz en cuello, las conquistas y la incomprensión de un hombre que piensa como mujer, es hipersensible y llora por ser como es, por no tomar decisiones y no disfrutar de lo bello que tiene alrededor. Sus hijas crecen (Ennis), su hijo crece (Jack) sus esposas despiertan, se apagan, la niñez en el espíritu, las ganas de seguir estando en ese paraíso difuso en donde todo no es vergüenza y desconfianza, donde no existe la paranoia. Sombreros de fieltro, ropa ensangrentada, camiones viejos, tractores, dos hombres saltan desnudos a la laguna, toros salvajes montados por 8 segundos, alces cocidos. La luna lobito me hace recordar a la exquisita musa, mujer de 23 años, casada, de gran pronunciación del español, de bellos muslos, francesa neta, Claire de lune; dichoso aquel su cuerpo penetró.

3 comentarios:

(autódios) dijo...

Que hermoso es cuando los muchachos se quieren.

luis hernandez dijo...

ay que vivir la vida como si fuera el ultimo momento....

elias dijo...

nunca pense que mi vida la volviera a recordar viendo esta pelicula