jueves, 26 de julio de 2007

Yo disparé a Andy Warhol (1996)

I shot aNdy wArhol (Dir. Mary Harron) La película empieza desde el final, es decir desde una mano temblorosa enchaquetada y una voz que suplica: Ahí está el elevador, sólo tómalo.
- ¿Cómo debemos ser con las personas que nos piden algo con mucha insistencia? ¿Cordiales, lejanas, secas, negativas? A veces los inaceptados no son la salvación de la humanidad, a veces ellos mismos son la confusión necesaria para hacer desinflar el zeppelin plomo con el que empezamos a alzarnos de la tierra; es más, quizá seamos más justos concediéndoles el cambio de sexo a los hombres que quieren ser mujer, que dándoles fama y dinero a esos grandes genios eclipsados, que viven en pocilgas, llenos de mala vibra y egoísmo hacia el mundo joven, adulto, venidero.
Score: John Cale. Actores: Lili Taylor, Jared Harris.
- Leer el S.C.U.M de Valerie Solanas, ver todos los films del señor Warhola.

martes, 24 de julio de 2007

Tesis (1996)

(Dir alejandro Amenábar) Atención señoras y señores. Hemos tenido un imprevisto y no podremos salir. Cómo ya se habrán dado cuenta, estamos detenidos a mitad de la estación. Ahora un encargado les abrirá las puertas para que puedan desalojar el tren. Sigan sus indicaciones, por favor.


Ángela (Ana Torrent) se aproxima a los andenes del subterráneo sin ir detrás de la fila. Busca ver el cuerpo de ese hombre que ha quedado partido por la mitad en medio de las vías ferroviarias. Y sin conceder se grita: No miren, no miren ¿El morbo nos devora?


Tesis es prohibición, silencio, es no poder mentir ante una filmación casera, ante una xt-500 sony, es el zoom digital, es escuchar una conversación telefónica por el otro anexo, es un cassette con polvo, una cinta de vhs que con sus imágenes puede causar un infarto. Tesis es Chema(Fela Martínez) es cine club, es literatura, es cine gore, es Ángela en camisón sintiendo que la filman al dormir, es Bosco(Eduardo Noriega), es cine snuff, es descuartizamiento, es sexo por asesinato, es instinto, es quedar en la oscuridad con algunas pocas cerillas, es un garage con paredes de mayólica, es una silla chata, una persona amordazada, es gente sin corazón, gente que grita de dolor y cree en la palabra, en la fuerza de las frases inyectadas de justicia. Ángela a razón de su tesis quiere violentar su mente sin ponerse agresiva. El Sr Figueroa tiene vergüenza de parecer un sádico, usa ventolín, Jorge Castro adora salir en retratos suyos con pistolas, los perseguidos se convierten en perseguidores, Mozart y Cannibal Corpse suenan en distintas cabezas, en stereo, en mono, todos son culpables, algunos posters se rasgan otros solo se venden: ¿De qué color son mis ojos? Besas la pantalla del televisor, besas a alguien apuesto, vejas el sonido de un canal que no proyecta emisión.

martes, 17 de julio de 2007

25 watts (2001)




(Dir. Juan Pablo Rebella y Pablo Stoll) Esta película representa el fin de semana universal de todo joven sin trabajo y sin ocupación, malpensante, creador de ideas innovadoras que brotan sobre los resortes de una cama destendida después de haber comido un plato de pasta preparado por una abuela adicta a las pastillas y a partirlas paritariamente con limas delgadas y sin mango. Leche, Seba y Javi, tres chicos uruguayos que viven laxos, receptivos, siendo algunos más de los infinitos personajes principales de esa serie concadenada, sin cable y sin artefacto, que es la cotidianeidad misma cuando se traza dentro de un círculo vicioso y se proyecta en la pantalla grande de un cuarto cinemista.

Un foco de 25 watts que pareciera ser el huevo de una gallina robótica sobre la pista, se convierte en la metáfora perfecta que tanto Javi le pedía a su novia le diga al no entender porqué ya no le quería tanto como antes. Así como los pernos no son necesarios en los bolsillos de ningún mecánico cuando los autos son pirotecnia; de la misma forma, los diálogos del día a día en este film, no le sirven a nadie, si uno sale a la calle con los audífonos en las sienes, a todo volumen, contra el hartazgo, contra la brisa, tratando de encontrarle el cuerpo al monigote carbonizado entre los arbustos.

¿A sus abuelos y abuelas se lo dedican, muchachos? Sí, así lo escribimos, bajo un fondo oscuro del mismo tono del écran, en la primera luz del proyector. Y bostezas sin querer y el perro ladra fuerte mientras sin pensar tocas el timbre y empiezas a correr mucho quizá no como un hamster que come comida de perro pero sí como alguien que se enamora de su profesora particular de italiano y aún no sabe la conjugación al presente del verbo essere ni la raíz cuadrada de 77, pero sí entra a las casas que ven televisión sin tocar la puerta ni pedir permiso.


¡Oda a Rebella! Yo sí aplaudo por 5 días seguidos

martes, 10 de julio de 2007

¡Qué bello es vivir! (1946)

It's a wonderful life (Dir. Frank Capra) Es la primera película que veo desde mi nueva pantalla viewsonic y debo decir que la calidad con que se ve la fotografía me ha dejado anonadado. Nunca antes había sentido ese mismo aislamiento mas que en el cine. Si bien, veo todos los films en mi sala cinemista, un cuarto blanco y pequeño, con la puerta de manija dorada, sé que ni a oscuras ni con la luz prendida podría encontrar ninguna estrella parlante pegada al techo debatiendo, cual Dios acompañado por sus discípulos, sobre ayudar o no a un hombre justo y honrado llamado George Bailey (James Stewart, joven) ¿Saltará o no del puente del pueblo de Bedford Falls?


(Luna de miel) (Canción de acetato quebrado)

No permitas que diga eso padre : De niño George Bailey quedó sordo del oído derecho por salvar a su hermano menor de morir ahogado en una laguna gélida, mientras jugaban sobre la nieve deslizándose por resbaladeras blancas con un grupo de niños. Desde su infancia George ya vivía para servir, para sacrificarse por el resto. Era un elegido.

(Teléfono dulce)

(En la piscina)

Sin embargo su vida se entrelazaría con una de las mujeres más hermosas que jamás haya visto en blanco y negro, su nombre Mary (Donna Reed) Una preciosura que pide deseos rompiendo vidrios en casas viejas, baila charleston tímidamente y sabe nadar.

Welcome to Bailey Park: Las ambiciones de George, sus sueños, las ganas de traer la luna a las manos de su amada, de construir edificios de 11 pisos, se ven postergadas continuamente, lo que origina una extensión de tiempo que poco a poco se va convirtiendo en una represión negra que lo va atragantando y silenciando como el humo de un cigarro caro. Es la época de navidad y la cólera invade los corazones de los hombres buenos, el dinero pretende comprar al desesperado que ama a su familia y los pobres creen en que los ángeles reciben alas al sonar de una campana ¿Cómo sería el mundo sin uno, si se suprimiera nuestra vida? ¿Todo seguiría igual? ¿Qué cambiaría en el?


lunes, 2 de julio de 2007

Los Idiotas (1998)


Idioterne (Dir. Lars Von trier) I'm a teaser. I'm the boss ¿Agua mineral o agua del grifo? Agua del grifo mozo, agua fría, la que hace que los que no gotean frente a los urinarios, orinen, orinen y orinen. Tenemos carne de res y chuletas de cerdo señora: Ummm, suena delicioso, pero no me lo podría permitir habiendo tanta gente que se muere de hambre en esta ciudad. Bodil Jorgense es Karen una mujer muy triste, pixeleada, que se sienta a la mesa con la servilleta debajo del plato.
Los idiotas es un film que parte desde una premisa: Ser un idiota es ser más real que el resto.
Jen Albinus es Stoffer, un gurú, una especie de Charles Manson rubio y sin barba que pretende cambiar el mundo por el suyo, un mundo en donde la idiotez se cosecha como una virtud, como el algodón dulce de un grupo de jovenes entusiastas que pretenden unir la dramatización con el comportamiento diario. En este caso Stoffer usa a los retardados mentales como vía de escape para alcanzar el éxtasis ¡Todos somos retardados mentales, saquen a su niño down de los intestinos, actuen como ellos! ¿No es bueno que se burlen de las personas, no? No ¿Y qué pasaría si un niño down los ve imitándolo? Quizá no diría ni un ápice, no se daría cuenta, no entendería nada; pero sabemos que solo un monstruo y un ser sin tripas podría seguir parodiándolos sin resquebrajarse ni acuclillarse de pena, al verlos jugar con tierra en las manos y zanahorias incrustadas que serían árboles de navidad vendibles de puerta en puerta por una buena causa que jamás existiría, jamás. El grupo neohippie-sordo vive en una casa de campo, que les sirve de refugio y de lugar de prácticas para el día del desprendimiento final, para el día en que el grupo ya no iría más de las manos sino ya cada uno por sí mismo, sin correcciones, sin espectar el avance del otro, sin saber si su idiotez se siente más creíble, sin sufrir sonriendo, ni anhelar preocupándose por el que dirán. ¿Qué pasa cuando un delincuente se dice cojo y lleva una pierna escondida en el pantalón? Se vuelve idiota.
Sólo intentaba disfrutar, creo que me lo merezco ¿no? Josephine es la mujer del film que más me atrajo, es dulce, tierna, suave y su retardo es amor puro. Karen se ata al grupo de improviso como un cachorro perdido que se atora a los engranajes de las otras cuerdas de la jauría pero su historia me desespera, cansa; al fin y al cabo Karen es eso ¿no? Ese algo que embota no solo al espectador sino a todos los personajes dentro del film, alguien que se convierte en el cable a tierra, en la conciencia del grupo y les hace ver el mal en ellos diciéndoles en tono de sermón lo feliz que la hacen sentir cuando se comportan de esa manera ¿Cómo habría dibujado Matisse una orgía del siglo XX?